¿ENTRENAR AL FALLO ES EL CAMINO CORRECTO?
Escrito por: 7/11
Una definición cruzada, tomando los conceptos “más agudos o exactos” de diversos autores, nos lleva a definir el fallo muscular como:
“La incapacidad momentánea del músculo para producir una cantidad de fuerza suficiente para completar un movimiento completo en su recorrido, tras varias repeticiones previas en las que sí se ha conseguido, frente a una carga determinada”.
Se realiza un movimiento dado con una carga dada, y llegado el momento X, el atleta no puede vencer la resistencia de la carga. X es, por tanto, el fallo muscular. Parece fácil, ¿no?.
Pues no tanto; ya que hay muchos otros factores que se dan por hechos, que se dan por excluidos o se omiten, ya no entre atletas, entrenadores o expertos, sino a nivel de estudio bien planteado a nivel metodológico: se habla de fallo muscular, clave en los resultados del estudio o programa de entrenamiento, como si fuera universal; y si no, pues es irrelevante.
Incluso en estudios que tratan de analizar el efecto del fallo muscular en concreto, se simplifica hasta lo absurdamente cómodo. La ciencia busca nombres que refieran constantes y eso, no sucede en el FALLO MUSCULAR.
- Si se realiza una serie al fallo trazando el fallo como el momento en que el atleta realiza una repetición y sabe que la siguiente no la completará…es un fallo predictivo. En realidad se trata de no llegar al fallo mismo, pero sí a la última repetición productiva antes del fallo que desencadenará un enorme daño muscular, pero, no deja de NO ALCANZAR EL FALLO EN LA REPETICIÓN, SINO EN LA SERIE. Éste es el fallo que muy pocos estudios mencionan y del que, suelo sacar más provecho.
- Si el atleta realiza una serie y llega al punto en que falla de forma activa, en cuanto note este efecto, ha de realizar una fuerza 0. Se expone durante milisegundos al fallo, pero se resguarda de él. Esto es ideal, pero poco seguro en ejercicios sean con mancuernas, barras, jaula o en multi/smith…incluso en máquina: el desentenderse de la carga al percibir la llegada del fallo puede acabar con un peso sin control lanzado contra el suelo y causar daños, materiales y en el atleta que rara vez podrá desinvolucrarse del ejercicio así, sin intervenir, aunque sea mínimamente, de modo isométrico y/o excéntrico al notar el fallo concéntrico. De hecho, suelo deducir que es el concepto más empleado por investigadores cuando no lo mencionan pero solo por algunos atletas.
- Si bien el caso anterior no es un fallo real concéntrico sino que se acompaña de trabajo isométrico y excéntrico aunque sea mínimo; lo usual en la ambición del atleta es el poder realizar la acción concéntrica de modo que la fase isométrica tras el fallo muscular concéntrico es desmesurada, e incluso e acompaña de una fase excéntrica a menudo tan larga como ⅓ del tiempo de contracción completa sin fallo. Es una cantidad de daño muscular que NADA tiene que ver con el atleta anterior, menos con los primeros. Y sin embargo, en estudios, en referencias o el uso común del término: hablamos de fallo, como misma acción.
- Cabe señalar otra acción que suele obviarse y es el concepto técnico. Si usáramos la técnica perfecta o al menos correcta para establecer el fallo, y ninguna repetición lograda sin técnica fuera contada…habría una crisis en el modelo de fallo muscular. Ya que, como muchos autores, no solo no veo el sentido a alargar una serie que obliga a efectuar una técnica que no estimula el músculo y puede ser lesiva. Sino que una serie, al ocurrir el NO estímulo de la fibra, no del músculo como un todo, sino a nivel fibrilar, debería considerarse como fallo muscular…si bien, aquí soy muy, muy flexible porque ni todo es cuestión de actividad fibrilar, ni muscular o neural aisladamente.
Pero, es algo interesante, saber que 2 atletas pueden calcar otros parámetros, y con una técnica perfecta, estar actuando a nivel fibrilar de manera muy distinta. Y sin embargo sabemos que el fallo muscular puede ser, o un aliado, un un mecanismo fatal que destruya al atleta: algo observado en estudios y a pie de calle. Sin variar ningún otro parámetro, el poder ser más CONCRETOS al usar el concepto de fallo muscular, permitiría a muchos acercarse sin miedo a él, y a otros a ver un abuso absurdo que resta ganancias. Sin entrar en volumen, frecuencia, descansos… Sabemos que la fatiga periférica (muscular) es el multiplicador clave de la carga, para alcanzar intensidad y sin embargo ni eso tenemos claro. La fatiga periférica se refiere a reducciones en la capacidad del músculo para producir fuerza, independientemente de la señal del sistema nervioso central (aunque parezca últimamente que sean hechos relacionados).Ocurre a través de dos mecanismos distintos (1) Reducciones en la activación de las fibras musculares individuales (2) Reducciones en la capacidad de las fibras musculares individuales para producir fuerza. ¿Cómo ocurre…?. No lo sabemos al 100%, intuimos que, sabemos que se da siempre X o Y fenómeno pero ni el fallo como tal se explica aún como modelo único relacionado causa-efecto.
CONCLUSIÓN: Aunque el fallo muscular posee múltiples aspectos positivos y únicos, éstos aparecen de forma concreta a corto plazo, no puede hablarse de un modo, menos de un sistema, sostenible en el tiempo.
Aunque era una cuestión que, desde hace décadas parecía demostrada aunque fuera de un modo resultadista al leer el trabajo de autores rusos como Verkhoshansky, el culturismo de los 90 trajo una sobresimplificación del concepto en un contexto de empleo masivo de substancias dopantes. Esto, unido a que, muchos estudios buscan el fallo muscular para poder igualar sistemas que parten de hipótesis diferentes, ha hecho que ciertos autores hayan confundido el alcance del fallo muscular, y el por qué de su función en estudios de rendimiento físico olvidando EL MAR DE PUBLICACIONES (a veces en ruso, y eso, jode) donde se corrobora el alcance limitado de llevar al fallo una serie, no ya varias, en un entrenamiento programado a varias meses vista.
El fallo ES VÁLIDO, pero en etapas concretas y de modo muy estratégico: lo contrario a lo que se defiende hoy en día.